En coincidencia con el reclamo cada vez más enfático de diversas economías regionales en crisis, representantes de la industria pesquera de Mar del Plata reafirmaron la compleja situación que cruza a la actividad local.
Desde Caipa advirtieron que los números negativos siguen marcando los balances de armadores y procesadores: “La situación de quebranto que nos afecta no ha tenido mayores cambios”, sentenciaron.
Mediante un comunicado de prensa, la cámara manifestó que no es todo oro lo que reluce en el sector, colocando como ejemplo la excelente temporada de langostino 2014, que permitió un salto de las exportaciones, tanto en volumen como en valor.
“Es cierto que el año 2014 finalizó con un record de exportaciones del sector pesquero; pero también es cierto que ese record debe ser interpretado y analizado correctamente para no caer en errores que pueden ser sumamente importantes”, aclararon.
Datos ofrecidos por Caipa expresan que durante el año pasado, el puerto de Mar del Plata se quedó con apenas el 3,4 por ciento de los desembarques de langostino; aunque también es cierto que barcos de firmas locales descargan en puertos patagónicos.
Costos
Más allá del marisco, es claro que la producción y el empleo giran aquí principalmente en torno a la merluza hubbsi y que la evolución de los precios de venta fue menor en relación al incremento de los costos, afectando el nivel de trabajo, sobre todo de los fresqueros.
Desde el año 2010, por caso, el gasoil se incrementó en un 299,5 por ciento; los salarios, un 245 por ciento, y en igual o mayor porcentaje todos los insumos. Por otra parte, el dólar quedó rezagado en la carrera; en el período analizado trepó un 125,6 por ciento.
“Pero como de costumbre alguno se preguntará porqué seguimos trabajando si perdemos dinero. La explicación es muy simple: la legislación pesquera establece que el titular de una cuota de captura debe pescar el 90 por ciento de la misma, bajo apercibimiento de perderla, lo que hace que las empresas aún sin rentabilidad, siguen produciendo para mantenerlas”, argumentó la entidad.
Por otra parte, los empresarios aseguraron que cualquier disminución parcial del trabajo, que pueda significar recortes en la mano de obra, es hoy imposible realizarlos, ya que si se intentara, se pondría en peligro al resto de la actividad.
“Los diferendos no se resuelven en la Justicia, sino en la leyes del piquete, y cesar la actividad en forma total es imposible para las empresas porque como se encuentra descapitalizadas no tienen los medios para indemnizar a su personal”, explicaron.
Retenciones
Asimismo, recordaron que las últimas reuniones sostenidos con el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, no desembocó en alguna medida de aliento. Aunque el comunicado no expresa, el sector espera por una baja de retenciones.
“El Estado por retenciones a los productos pesqueros está recaudando, en una estimación simple, no menos de 105 millones de dólares por año, que significan al cambio oficial unos 892 millones de pesos”, recordaron en el tramo final del comunicado.