El puerto de Mar del Plata aumentó durante 2013 su participación en los desembarques de merluza. Según datos preliminares de la Subsecretaría de Pesca de la Nación, en los últimos doce meses acumuló 191.835 toneladas.
El volumen equivale al 71,3 por ciento del total descargado de hubbsi, unas 268.865 toneladas. Teniendo en cuenta el promedio de los últimos cuatro años, el salto de la terminal local supera los seis puntos porcentuales.
Más retrasados aparecen Puerto Madryn (35.657 t.), Caleta Paula (17.490 t.), Comodoro Rivadavia (12.905 t.) y San Antonio Este (7.744 t.), entre otros puertos.
A Mar del Plata llegaron 168.756 toneladas provenientes del stock sur, ubicado por debajo del paralelo 41° sur, y 23.098 del stock norte; aunque el número final podría ser mayor si se considerara el factor “subdeclaración”.
En cualquier caso, el volumen sirvió para sostener la actividad y terminar de cicatrizar aquellas heridas que había abierto el paro de cuatro meses en 2012. Al mismo tiempo, confirmó cierta estabilidad biológica del efectivo sur.
Razones y efectos
La trasferencia del recurso hacia los muelles marplatenses se inició con la cuotificación de 2010. Por entonces, se hablaba de un piso del 60 por ciento para la ciudad. Luego, comenzó a crecer ese número por el deterioro económico que sufrieron las empresas patagónicas.
Antes las dificultades, la mayoría de los armadores locales buscó la subsistencia y siguió operando; aún con intermitencias. “La pesca marplatense es una cultura y no una actividad comercial casual”, repite el presidente de Cepa, Oscar Fortunato, para marcar diferencias.
La necesidad de sostener los compromisos comerciales con los clientes del exterior, las cuotas de captura y la ocupación de las tripulaciones hicieron el resto.
Pero estos ingredientes, sumado a las dificultades que exhiben las plantas en tierra, con problemas de competitividad y alta conflictividad laboral, generaron que la oferta de entero en muelle por momentos fuera difícil de absorber.
Como consecuencia, cayeron los precios en primera venta. Por caso, el cierre del año pasado estuvo caracterizado por un pico en los desembarques que dejó en los tres pesos el kilo de merluza. La recuperación recién está llegando por estos días, cuando el producto escasea.
Recibió el 71,3 por ciento del total desembarcado de hubbsi. Ese porcentaje equivale a unas 191.855 toneladas. El lado B de la transferencia, en los precios.
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