Varias entidades sindicales y cámaras empresarias vinculadas a la marina mercante de los dos países, hicieron una vez más el pedido para poder avanzar de manera inmediata en un nuevo acuerdo bilateral, tras la derogación de la Ley 23.557 constituida hace 35 años.
Lo ocurrido con la supresión del convenio fue la liberalización del tráfico marítimo de mercaderías entre ambos países para navieras con banderas de países externos, decisión que fue rechazada tanto por el sector marítimo argentino como por el brasileño.
De ese modo, la medida benefició puntualmente a los denominados “buques de conveniencia”, que no son otra cosa que las embarcaciones que llevan una bandera distinta a la del país de su propietario, teniendo una mayor competitividad en costos al aprovechar estados con legislación y regulación laxa, tasas de matriculación e impuestos mínimos o inexistentes, salarios bajos y condiciones de trabajo deficientes.
Con la derogación de la Normativa, disminuyó el volumen de mercancías transportadas entre ambos países de acuerdo a lo que informó la Agencia Nacional de Transportes Acuáticos (Antav) de Brasil, quien informó que en el año 2021 se transportaron 341.000 TEU’s y en 2022 sólo 101.000 TEU’s entre la Argentina y Brasil.
En una reunión desarrollada en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires la semana pasada, un grupo de armadores y sindicatos marítimos de Argentina y Brasil reiteraron la necesidad de contar de forma urgente con un nuevo acuerdo de integración marítima en la región.
Esta política de estado permitiría “mantener la soberanía logística y comercial de la región”, indicaron en un comunicado conjunto la Federación de Empresas Navieras Argentinas (FENA) y la Federación Sindical Marítima y Fluvial (Fesimaf).
Desde el lado brasileño, se manifestó también la preocupación por la caída del tráfico comercial y evaluaron como propicia la llegada de Luiz Inácio Lula da Silva a la presidencia del país vecino para pugnar por un nuevo acuerdo.
“Es importante que existan políticas de Estado que permitan contar con una flota nacional y regional competitiva que garantice el abastecimiento de nuestras naciones y contribuya a nuestras necesidades logísticas”, afirmó el titular de FENA, José Elverdin en el desarrollo de la reunión.
Además de la FENA y la Fesimaf, participaron en el encuentro, por nuestro país, el Sindicato de Obreros Marítmos Unidos (Somu), el Centro de Jefes y Oficiales Maquinistas Navales (Cjomn); y el Centro de Capitanes de Ultramar y Oficiales de la Marina Mercante (Ccuomm).
Por el lado de Brasil, estuvieron presentes altas autoridades de la Asociación Brasilera de Armadores de Cabotaje (Abac), la Confederación Nacional de Trabajadores en Transportes Acuáticos y Aereos en la Pesca y los Puertos (Conttmaff); y la Federación Nacional de Trabajadores en Transportes Acuáticos y Afines (Fnttaa).
Mientras que por parte de nuestro país, la representación gubernamental estuvo a cargo del director de Política Naviera y Marina Mercante del Ministerio de Transporte, Germán Khalow.