El 25 de julio de 2025, las cámaras empresarias CAPIP, CAPeCA y CEPA presentaron ante el Consejo Federal Pesquero (CFP) una solicitud conjunta en la que pidieron que no se aplique durante el presente año el artículo 28 de la Ley Federal de Pesca Nro. 24.922, ni la Resolución CFP Nro. 2/2020 que reglamenta la inactividad comercial de los buques pesqueros.
El planteo surge en el marco de la paralisis total que afecta a la flota congeladora tangonera, cuya especie objetivo es el langostino, producto de un conflicto de índole gremial de público conocimiento sin resolución. Las cámaras señalaron que, pese a los esfuerzos desarrollados por el sector empresarial para acordar condiciones salariales con los gremios marítimos, sólo se alcanzaron acuerdos con el sindicato de capitanes y con el de conductores navales, mientras que las negociaciones con SOMU y SIMAPE, representantes de la marinería, no lograron avances por lo que describen como una “actitud dogmática e irrazonable”; por ahora.
En este contexto, las cámaras informaron al CFP que no armarán buques para la temporada 2025, y que dicha decisión debe considerarse como plenamente justificada a los efectos de evitar sanciones por inactividad comercial.
La preocupación del sector se relaciona con el artículo 28 de la Ley 24.922, que establece la caducidad automática del permiso de pesca si un buque permanece más de 180 días consecutivos sin operar comercialmente y sin justificación. Sin embargo, según lo dispuesto en el artículo 9 de la Resolución CFP Nro. 2/2020, ese plazo se computa por temporada para aquellos buques que dirigen exclusivamente sus capturas a langostino, calamar o crustáceos bentónicos, es decir, para el caso de tangoneros contabiliza desde el 9 de julio pasado, fecha que quedó abierta la temporada de pesca de langostino en aguas nacionales 2025.
Por lo tanto, no sería necesario realizar una marea interruptiva para conservar el permiso de pesca, siempre que el buque tenga autorización exclusiva sobre langostino.
No obstante, las cámaras también solicitaron que se contemple esta situación para aquellos buques que además del langostino cuentan con autorizaciones para capturar otras especies no cuotificadas.
La presentación busca evitar sanciones administrativas y brindar claridad ante un escenario de conflicto que mantiene paralizada a buena parte del sector. A su vez, pone de manifiesto la división entre gremios y la preocupación empresarial frente a la pérdida de una temporada clave para la actividad exportadora argentina.