A través de una nota formal dirigida al Consejo Federal Pesquero (CFP), el Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU), encabezado por su secretario general Raúl Omar Durdos, expuso su preocupación por la parálisis que afecta a la flota congeladora tangonera durante la temporada de langostino 2025 en aguas nacionales, que se encuentra habilitada desde el 17 de marzo.
Según el sindicato, la falta de actividad en los buques congeladores no responde a ninguna restricción biológica ni administrativa, sino a una decisión empresarial coordinada. “Es evidente que están realizando un claro ‘lockout’, extorsionando a esta institución y a los trabajadores para que firmen una reducción en los valores de la producción del convenio colectivo vigente y homologado”, sostuvo Durdos en el documento.
El gremio aclaró que, desde el inicio de la temporada, no se han tomado medidas de fuerza por parte del personal embarcado que impidan la salida de los buques. “Nuestros afiliados están disponibles para trabajar desde el 17 de marzo, pero los barcos no zarpan por decisión de las empresas”, remarcaron, y señalaron como excepción al congelador Mar Sur, que ha mantenido su actividad, así como los tangoneros San Juan B y Pedrito, que se sumaron recientemente a la zafra.
El SOMU también recordó que ha participado en todas las instancias de negociación convocadas por la Secretaría de Trabajo del Ministerio de Capital Humano, sin lograr avances concretos debido a que las cámaras empresarias “pretenden reducir costos a costa del trabajo del personal embarcado”.
Además, el sindicato afirmó haber solicitado al CFP y a otros organismos medidas fiscales para aliviar la situación del sector, como la suspensión del Derecho Único de Extracción (DUE), la eliminación temporaria de retenciones para el langostino procesado y congelado a bordo, y otras herramientas de apoyo económico.
“El perjuicio para los trabajadores del mar es enorme, en una temporada que ya lleva más de cuatro meses habilitada y con muy pocos buques operando. No hemos entorpecido ni entorpeceremos el desarrollo de la actividad pesquera, que representa ingresos por más de dos mil millones de dólares anuales para el país”, concluyó el SOMU, que ratificó su compromiso para seguir buscando soluciones que permitan retomar la actividad y garantizar condiciones laborales justas.