La especie abadejo, preservada desde hace mucho tiempo por parte del INIDEP, habida cuenta de valores que podían haber llegado al colapso de la especie hace mas de 10 años en caso de no tomar medidas precautorias, todos los años por esta época es noticia.
Recientemente se canceló la campaña a la especie calamar debido a impedimentos de índole técnico en el Buque de Investigaciones que tenía prevista esa evaluación, y es muy probable, que la especie abadejo, que durante el mes de diciembre se solicitó la posibilidad de una campaña ad hoc, no pueda ser evaluada por las mismas razones. Los astilleros locales están saturados de trabajo hasta el mes de marzo próximo, por lo que las reparaciones e inspecciones podrían demorarse algunos meses, quedando fuera del calendario la posibilidad de evaluar la especie con dicho buque.
Es así, que el recurso ya comenzó a aparecer fuera de los pozos y en parte, fuera de la zona de veda, prueba de ello, son las descargas en diferentes muelles.
Es el caso de algunos buques que fueron sancionados, hubo dos fresqueros de altura a fines de enero, 7 de Diciembre y Marianela; y ayer, según fuentes confiables, un buque de Mar del Plata ingresó a un puerto sureño (Camarones, ante el silencio de personal de la descarga de ese puerto), que habitualmente opera ese puerto solo en temporada de langostino, con una abultada cantidad de abadejo (según consta en el PPE casi 800 cajones, pero tendría más del doble), evidentemente no incidental porque era la única especie descargada y además sin ser la primera vez que lo hace, el año pasado apagando AIS realizó descargas en el puerto de Mar del Plata. Consultamos a su armador José Greco, sin respuestas a nuestra solicitud.
Durante la recorrida en la banquina local, el miércoles a la noche hubo un fuerte operativo de control sobre la descarga del BP Canal de Beagle, en el mismo no se detectó ninguna vulneración a la resolución por superar especies incidentales.
Se debe destacar, que desde la autoridad de aplicación en la Dirección Nacional de Control y Fiscalización Pesquera, es simple monitorear, detectar y diferenciar una pesca incidental, de una objetiva, por cuanto en caso realmente de ser incidental siempre es conveniente encajonar e informar el accionar.
Técnicos de la Dirección, analizado el derrotero, formas y lugares de operación, se determina el grado de ocurrencia, participación y/o dolo en la operación de pesca.
En esta época del año, desde enero a abril, rastrear cerca de los pozos, es una actividad que difícilmente se pueda justificar como una captura incidental.