Hoy sábado a las 9 de la mañana, el Astillero Contessi se vestirá de gala nuevamente para celebrar un hito en la industria naval: la botadura del buque fresquero de altura «Marlene del Carmen«.
Con un diseño imponente de 26,90 metros de eslora y 7,89 metros de manga, características del prototipo 27 AC-CV de la ingeniería naval del astillero a cargo del equipo del Ing.Naval Leandro Goñi, operará desde el puerto de Comodoro Rivadavia lugar de asiento y base de operaciones de la empresa propietaria del empresario Luis Santander .
Se trata de la botadura número 151 en la historia del astillero, consolidando su legado como un referente en la construcción naval argentina. En un contexto desafiante y crítico para el sector pesquero, la llegada de esta nueva embarcación representa un soplo de aire fresco y una muestra de la capacidad del país para seguir innovando y apostando por el desarrollo productivo.
El Marlene del Carmen ha sido diseñado para optimizar la pesca de altura, con una capacidad de almacenamiento de aproximadamente 3100 cajones en bodega. Su versatilidad le permitirá operar con técnicas de arrastre y media agua, maximizando la eficiencia en la captura. Este nuevo integrante de la flota sustituirá al histórico «María Rita «, un fresquero de 2200 cajones cuyo permiso irrestricto además, cuenta con la renovada CITC de merluza común que, aunque cederá su lugar en la primera línea, seguirá activo bajo un permiso provincial.
La ceremonia de botadura, que siempre es un acto de los mas emocionantes del puerto local, contará con la presencia de las familias armadoras, invitados especiales y destacadas autoridades civiles y militares como así también para el público en general que desee asistir a la ceremonia.
En un emotivo momento, Karina Haidée Tascón asumirá el honor de ser la madrina del buque, brindándole su bendición antes de su primer contacto con el mar. Para aquellos que no puedan asistir en persona, el evento será transmitido en vivo a través del canal de YouTube del histórico astillero marplatense.
Más allá de la celebración, este acontecimiento nos recuerda la perseverancia de la industria naval y pesquera, dos sectores profundamente entrelazados que, a pesar de los desafíos económicos, tributarios y regulatorios, continúan avanzando con determinación. La botadura del Marlene del Carmen es, sin duda, un símbolo de la fortaleza y la visión de futuro de quienes apuestan por el crecimiento pesquero argentino. Buena pesca, buena mar y buenos vientos …