El abadejo es una especie comercial por excelencia y complementaria de la actividad pesquera fundamentalmente marplatense. Años atrás, se lo capturaba por una demanda sostenida que el mercado internacional demandaba, no solo en estado de filete, sino en cocochas, garganta, H&G y ademas, la vejiga, muy preciadas por la industria farmacéutica y cosmetológica, ya que la misma, debido a su alto contenido de colágeno, es la base de numerosas cremas faciales y para regeneración de piel de mamas en tratamientos regenerativos post cáncer; además, la vejiga es usada para elaborar tipos de pegamento, hilos orgánicos para suturas delicadas de órganos, clarificar cervezas, preservar documentos, para cocinar e incluso para preparar alimentos para bebés. Al margen de las utilidades, se desprenden de estas aplicaciones, la intensidad de mano de obra que posibilita este recurso, con un aprovechamiento integral y humano después de la actividad primaria extractiva.
El abadejo termina siendo un generador de mano de obra pero ademas de divisas, debido a lo preciado de su carne, fundamentalmente para los mercados internacionales y fundamentalmente, Brasil.
Es real, que desde el año 2011 y mucho antes, el INIDEP considera que el abadejo presentaba signos de acentuada debilidad. A tal punto que el Informe Técnico Oficial N° 33, “Análisis de la pesquería comercial de abadejo y del estado de explotación del recurso”, habla de “riesgo de colapso”.
En aquella época, los Informes Técnicos Oficiales, según los científicos, “ la población se encuentra muy por debajo del Punto Biológico de Referencia Límite, que para esta especie está considerado como el 20 por ciento de la relación entre la biomasa reproductiva actual respecto de la virginal “.
Ese valor fue estimado para el último año en 13 por ciento, describe el trabajo elaborado sobre la base de modelos matemáticos alimentados por datos de desembarques, de observadores y muestreos, ya que el instituto no ha realizado campañas de evaluación directa en los últimos años.
De acuerdo a la mirada de los armadores, la no realización de cruceros científicos atenta contra el diagnóstico y aseguran que el escenario es menos dramático: “ Las estadísticas de desembarque no expresan la realidad biológica de la especie ”, expresan.
Sin embargo, el informe del INIDEP al que accedió Pescare.com.ar contrapone: “ A pesar de las recomendaciones dispuestas a partir de diciembre de 2012, no se observan señales de recuperación del estado del recurso, considerando que las capturas declaradas han superado en los últimos años a las Capturas Máximas Sostenibles ”.
Bajo este análisis, se recomendaban las siguientes medidas de manejo:
• Mantener las restricciones en los cupos de captura de abadejo por marea y mes.
« A través del cumplimiento de los cupos por marea se limitaría la captura de abadejo proveniente del sector aledaño a la veda de juveniles de merluza, entre 44º y 49º S y hasta los 200 los metros durante el verano, debido a que es la época y el área de reproducción », consideran los especialistas, aunque para el recurso abadejo es estricto y no así para otras especies, donde se capturan en zonas y épocas de desove, es el caso del langostino a partir de diciembre y hasta entrado el otoño en sectores costeros.
• Evitar la pesca dirigida con redes de arrastre y otros artes, en las zonas donde se concentra casi en forma exclusiva (pozos) de abadejo hasta tanto se evidencien signos de recuperación.
• Ejercer el estricto control de la Captura Máxima Permisible, considerando que además de Argentina otros países capturan abadejo dentro de la plataforma continental argentina.
• Controlar el sub reporte de la especie en la estadística oficial, ya que Cordo y Waessle, (2014) mencionaron la probabilidad de que se haya incentivado dicho efecto como consecuencia de las medidas implementadas en los últimos años.
• Reforzar el muestreo y sub muestreo de abadejo en la flota merlucera fresquera y congeladora por parte de los observadores del INIDEP. Esta información permitirá aumentar el conocimiento sobre la estructura de la captura e incorporarlo a las evaluaciones y sugerencias de manejo.
En este último punto, algunos entendidos difieren, puesto que siempre se trató al abadejo dentro del seguimiento e investigación de la pesquería de merluza, cuando los espacios físico-temporales y batimétricos son distintos. Otra vertiente habla “ que desde el mismo INIDEP se han retirado los especialistas de esta especie y como medida precautoria se continua protegiendo el recurso “, a pesar que países como España y Corea del Sur, mediante arrastreros y palangreros operan en zonas aledañas a los pozos de cría y reproducción cercano a la milla 200 desde hace mas de 20 años, aun cuando el estado de la biomasa y reproductores era crítico.
Teniendo en cuenta el estado del efectivo y el nivel de explotación, el recurso compartido con la flota extranjera que arrastra al borde de la milla 200 y las características biológicas de la especie, “ sin un plan de manejo conjunto con la flota extranjera que opera fuera de la ZEE argentina, es poco probable que se produzcan reclutamientos exitosos que permitan la recuperación de la Biomasa Reproductiva a valores biológicamente seguros en el corto -3 años- o mediano -7 años)-plazo ”, decía el ITO de aquella época.
Se percibe así, la primera señal del impacto generado por la flota extranjera en la milla 201 con incidencia directa en el manejo de la pesquería.
Hoy, se desconoce el estado general de esta pesquería, y lo que se propone no es pescar, por el contrario, sino direccionar una campaña ad hoc a esa especie, determinar su estado real y someterse al Informe Técnico Oficial (ITO). Si la situación sigue igual, protegerlo.; pero si el estado de la biomasa y reproductores creció, y el recurso esta para pescar, se abra la posibilidad de hacerlo con los limites de CMP que lo establezca la entidad rectora biológica.
Asimismo, desde hace varios años las cámaras de la pesca presentan solicitudes de prospección entrado el mes de noviembre y diciembre para poner en consideración la situación del recurso. Este año, con importantes fundamentos, CAPEAR ALFA lleva adelante una solicitud de investigación sobre el recurso. Algo mucho mas profundo y de fondo que una simple prospección por la flota comercial. Mediante nota presentada, con la firma de su presidente Mariano Retrivi, la misma, solicitó al CFP y puso en consideración al mismo Subsecretario de Pesca y Acuicultura Dr. Carlos D. Liberman para que medie la posibilidad de realizar una campaña de investigaciones con el BIP Dr. Eduardo L. Holmberg, que a decir verdad, sería la primera después de 15 años a esa especie en particular. Es sabido, que el abadejo, se lo investiga cuando los buques de investigaciones realizan campañas especificas del recurso merluza hubbsi, pero uno de los reclamos de la Cámara, es que los espacios físico-temporales no son los adecuados, es decir, no es la zona de abundancia de la especie abadejo, ni la época justa para medirlo; por lo que en fundados argumentos, se espera la solicitud por parte del INIDEP.
Mientras tanto, en el 45° aniversario de la Institución, PESCARE, pudo acceder a cierta información de privilegio, donde las autoridades de dicho instituto están de acuerdo con los planteos del sector armatorial, mientras analizan los costos de dicha campaña, para sin dudas, desde allí, tener un sondeo claro de la situación que se encuentra el recurso abadejo sin estimaciones del pasado con fundamentos inconsistentes y precautorios hacia dicha especie.
La pesca es una actividad que busca permanentemente reconvertirse entre la disponibilidad de los recursos y el mundo dinámico de la demanda, a pesar de ellos, hay especies que siempre han tenido un piso de demanda por encima de la disponibilidad de la pesquería. Este es uno de ellos, por lo que se invita a realizar un estudio fehaciente del estado del stock para buscar el equilibrio entre la disponibilidad del recurso y el máximo aprovechamiento del mismo. Esa tarea necesita de certeza biológica científica para alcanzar ese equilibrio y poder satisfacer la demanda generando trabajo, mano de obra ocupada, divisas y desarrollo.
Ver nota de CAPEAR ALFA al CFP solicitando la campaña de investigación a ese recurso.