La Asociación Argentina de Capitanes, Pilotos y Patrones de Pesca (AACPyPP), representada por su secretario general, Jorge Frías, renovó junto a la Cámara Argentina de Armadores de Buques Pesqueros de Altura (CAABPA), encabezada por Diego García Luchetti, y la Cámara de la Industria Pesquera Argentina (CAIPA), presidida por Fernando Rivera, el acuerdo salarial de carácter excepcional que regirá desde el 1 de octubre de 2025 hasta el 28 de febrero de 2026.
La prórroga del acuerdo se produce en un contexto complejo para la pesca de altura, donde las empresas enfrentan un escenario de precios internacionales fluctuantes, costos dolarizados, Tipo de Cambio imprevisible y dificultades logísticas que presionan sobre la rentabilidad. En paralelo, la estacionalidad de las capturas y los plazos de cobro suman complejidad al escenario interno que llevaron a las partes a mantener un esquema excepcional, priorizando la continuidad laboral y la paz social que caracteriza a los capitanes.
Apoyado en los mecanismos previstos por la Ley 24.013 y el Decreto 633/2018, el nuevo acuerdo ratifica el compromiso de gremio y cámaras de sostener la cooperación y la buena fe en un marco de crisis. Las medidas, explicaron, apuntan a preservar aportes y contribuciones, garantizar la cobertura de salud, mantener la base previsional y evitar conflictos en la flota.
Durante la nueva vigencia, las remuneraciones derivadas del Convenio Colectivo 638/2011 se adecuarán bajo un esquema transitorio:
- De octubre a diciembre de 2025: 30% remunerativo y 70% no remunerativo.
- De enero a febrero de 2026: 50% remunerativo y 50% no remunerativo.
El carácter no remunerativo será temporal, aunque se computará para aguinaldos, licencias, adicionales e indemnizaciones, manteniendo los aportes sindicales y la cobertura médica sin cambios.
Asimismo, las empresas que adhieran al acuerdo se comprometen a no despedir sin causa, ni suspender personal por razones económicas u organizativas, ni reducir salarios durante su vigencia. A cambio, el gremio garantizará la paz social y la ausencia de medidas de acción directa, siempre que se cumpla lo pactado.
El acuerdo renovado tendrá vigencia hasta el 28 de febrero de 2026 (inclusive), momento en que caducará sin necesidad de interpelación. Las partes solicitaron su homologación ante la autoridad laboral, pero destacaron que su aplicación es inmediata en virtud de los principios de buena fe, colaboración y solidaridad.
Con esta renovación, el sector pesquero fresquero de altura busca ganar tiempo frente a un panorama todavía inestable, priorizando la conservación del empleo y el sostenimiento de la actividad hasta el cierre de la próxima temporada.