Culminó su tarea la grúa flotante Magnus VI de la empresa Servimagnus. La misma fue la encargada de reflotar, adrizar y poner en movimiento hasta su destino final -ayer- al malogrado BP Pescargen IV que al mediodía del 5 de agosto del año pasado haya zozobrado ante la merida y camaras de quienes asistían en la descarga.
Su destino final, cercano al muelle Storni de Puerto Madryn, lugar donde se ubican los buques inactivos y pronto al desguace.
Por el momento la operación fue terminada sin contratiempos, fundamentalmente sin accidentes ni imprevistos, en tiempo y forma. Ahora, quedan varios trámites administrativos y de índole ambiental para dar inicio a un plan de desguace que podría iniciarse una vez concluida la esterilización de combustibles e hidrocarburos contaminantes y ser aprobado por la Autoridad Marítima un plan de desguace acorde a legislación vigente. Tarea nada sencilla, y que por experiencia de lo que sucede en los muelles de Mar del Plata, lleva mucho tiempo reunir la documentación, planos y autorización definitiva para dar curso a la propia reducción a cero del buque inutilizado.
De esta manera termina, en principio, la primer tarea hacia el desguace final del BP Pescargen IV, que fue reflotarlo, adrizarlo, peritarlo, transportarlo y vararlo sobre la zona de desguace, ya esta finalizada. Lo próximo es más administrativo que operativo (no es poca cosa), podría llevar varios meses y algunos contratiempos burocráticos como de costumbre.