Todos miran al INIDEP y sus definiciones con respecto a la construcción del buque de investigación ICE CLASS. ¿Quién lo debe definir? ¿El propio Instituto? ¿El Estado argentino? ¿El BID que es quién lo financiará?, o ¿algún monje negro que no se cansa de viajar haciendo lobby ad hoc para lograr el objetivo?…
Justamente fue el propio director del Instituto Lic. Oscar Padín, quien durante el 1º Congreso de la Iniciativa Pampa Azul, se encargó de poner el tema sobre el tapete, luego de reconocer el esfuerzo de las tripulaciones y del BIP Victor Angelescu en campañas como la afrontada este año a las Islas Georgias, pero sin ser el buque adecuado para hacerlo.
“Por suerte tenemos el ‘Austral’ (del CONICET) que opera la Armada pero en temas de oceanografía. En este caso también necesitamos un buque que pueda abordar el estudio de las pesquerías.”, sostuvo Padín.
Entre las necesidades que tiene el INIDEP relatadas por su director, puntualizó sobre “un nuevo buque pesquero oceanográfico, que es un buque de 85 metros que está en la última etapa en la definición del perfil para largar la licitación con un crédito del BID”, afirmó Padín el último 8 de noviembre.
En su disertación dejó aclarado: “…en el futuro muelle (en referencia al del INIDEP), que si Dios quiere pronto lo tendremos, también vamos a poder tener nuestro nuevo buque Ice Class, fondeado por lo menos un par de meses en verano. Este buque es una oportunidad única, será una oportunidad muy grande, que tiene que ver con la licitación internacional, que no fue una decisión del INIDEP –para aclarar algunas cosas que surgen por ahí-. Ese buque va a permitir realizar convenios o fortalecer convenios que tenemos o con instituciones del Estado y también con países que tengan interés en cooperar con Argentina y trabajar en conjunto para abordar una serie de investigaciones que excedan las capacidades que hoy tenemos”, concluyó Padin.
Por otra parte y con una enorme claridad, Domingo Contessi le contó a esta Editorial y lo hizo aún más público días atrás en la botadura del “Yani G”. Ver nota que tuvo un fuerte impacto en nuestro colega Adrián Amoedo y publicado por el prestigioso “Faro de Vigo” de España bajo el título “Freire, Armón y Gondán” se postulan para fabricar el mayor oceanográfico de Argentina.
Amoedo relata que el INIDEP cierra el plazo para recibir propuestas de astilleros con tres españoles y otros de China, Holanda, Corea, Francia y Argentina (lo que más nos interesa desde nuestro lugar).
“Argentina inició a finales de agosto la tramitación internacional para localizar a un astillero que fabrique el que será su mayor buque oceanográfico, una unidad de clase polar de al menos 85 metros de eslora. A finales de octubre, y tras haber habilitado una prórroga, el Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (Inidep) recibió las muestras de intereses de una serie de compañías y, como estaba previsto, el naval gallego está representado por Armón y por Freire Shipyard, las dos atarazanas especializadas en la fabricación de estos barcos altamente especializados. Los dos forman, junto a Astilleros Gondán, la representación española en un proceso al que también se presentaron atarazanas de la propia Argentina, China, Holanda, Corea del Sur y Francia.”, describió en la publicación.
En su informe publicado este mismo domingo, “Faro de Vigo”, destaca: “Argentina logró en el primer trimestre 125 millones dólares (unos 115 millones de euros al cambio actual) del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para desarrollar el Programa de Fortalecimiento de los Servicios de Sanidad Agropecuaria y del Manejo Sustentable de los Recursos Marítimos de Argentina (Prosama), cuyo principal objetivo es la construcción del buque.”
“En concreto, el proceso se cerró el pasado 23 de octubre y según pudo saber este periódico en fuentes cercanas al proceso un buen número de astilleros se postularon para llevar a cabo la obra. Armón, que ya facturó en sus instalaciones de Vigo otros dos oceanográficos para Argentina (Víctor Angelescu en 2017 y el Mar Argentino en 2019), y Freire, que fabricó unidades emblemáticas para países de Sudamérica como el BAP Carrasco (2017), de Perú, figuran entre los contendientes.”, describe el artículo en la parte referida a nuestro país y al futuro buque.
“Ahora, una consultoría internacional se encargará de recabar las propuestas e iniciará una licitación que será de carácter internacional. Los astilleros podrán entonces presentar sus ofertas, tanto técnicas como económicas, para su valoración.”
“En liza hay dos astilleros argentinos, si bien la industria del país se ha mostrado en las últimas semanas muy disconforme con la licitación. El responsable del Astillero Federico Contessi, Domingo Contessi, se mostró muy crítico con sus gobernantes por el momento en el que lanzó la licitación (Argentina sufre una crisis inflacionaria) y por las especificaciones técnicas del buque, que alejan el pedido de la industria local. ‘Son prácticamente iguales a las especificaciones del buque Odón de Buen’, dijo al medio local Pescare en alusión al buque que construye Armón Vigo para el Instituto Español de Oceanografía (IEO), dejando caer que será este astillero el que se adjudique la unidad argentina. “Es demasiado burdo”, denunció.
“El Gobierno de Uruguay anunció en julio que el astillero vigués Francisco Cardama construirá dos patrulleras de vigilancia de altura (OPV, offshore patrol vessels) por 82,2 millones de euros para ampliar y mejorar la vigilancia de sus mares. Y Argentina no se quiere quedar atrás. La Prefectura Naval del país anunció que comprará cuatro unidades similares para renovar su flota y poder controlar su amplia plataforma marítima.”, agrega además la periodista Lara Graña.
Ahora bien, ¿el nuevo escenario político de la Argentina permitirá esto? ¿Lo dejarán “abrochado” antes del fin de la gestión del actual gobierno aun sabiendo que podría terminar en un escándalo?
Al cierre de la presente edición de PESCARE es todo incertidumbre. Teléfonos que dejaron de atenderse y respuestas a tono de disculpas por no saber que decir ante la reciente elección del nuevo Presidente de la Nación.
Se moverán varias “fichas”, de eso no hay dudas si es que el cambio realmente va a existir y el orden prometido sea una realidad, en definitiva, todas las personas de bien pretendemos que el trabajo de la Argentina se haga en nuestro país.