Llegan a esta editorial decenas de mensajes, algunos muy alineados, otros hasta aturdidos por la inmensa elección de ayer, para otros, inesperada.
Intentemos hacer un ejercicio que tiene que ver con los escenarios que pudieron haber sido, y a Dios gracias, para la pesca de Mar del Plata, la histórica, la que marcó el camino de aquellos viejos gringos con la canasta y un pan casero con agua, aceite y unas rodajas de tomate con orégano, no fue.
Todo hacía presuponer que la patada en el hormiguero del joven Ignacio Torres en Chubut, como electo gobernador de esa provincia, feudo de Arcioni y su banda, después de la escandalosa nueva Ley de Pesca de esa provincia y otras irregularidades, podía gatillar algún esparcimiento hacia otras latitudes. Qué menos que un ascenso directo al Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, o quizá, la más apetecible butaca de la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura de la Nación en Paseo Colon 822, más algunas estratégicas direcciones nacionales, como lugar de desembarco de quienes producto de un eventual crecimiento en precios y demanda del langostino, les prestaron el traje de distinguidos empresarios de la Pesca Argentina. Muchos lo son, pero con la humildad, el trabajo y la inversión, que no caracterizó precisamente a esta administración de Pesca de Chubut y mucho menos a la anterior.
Pero jamás la cola movió al perro.
Inmersos en la ebullición de encontrarse con un recurso que, solo se subía al barco, a apenas 5 millas de la costa, creyeron que todas las butacas disponibles estaban listas para ser ocupadas el próximo 10 de diciembre. Algunos mientras se medían el traje a medida en el Sastre, otros ya se hacían los rulos. Pisoteando la pesca histórica de quienes viven en el muelle de Mar del Plata constituyendo un hito en la producción primaria extractiva y en la generación de trabajo que hicieron a Mar del Plata el epicentro de la pesca argentina, cuna de viejos lobos de mar.
Aparecieron figuras, de vuelo tan corto como el de la perdiz, que hasta intermediaron con una de las peores representaciones que tuvo la provincia de Buenos Aires en el Consejo Federal Pesquero, liderada por el Lic. Javier Rodríguez y la Lic. Carla Seain por un reparto de 5000 toneladas de langostino impulsada por quienes encuadraban perfectamente en el modelo que se intentaba perpetuar en el poder, el de la ventaja y el camino con atajos y negociados; así, algunos comentarios en el muelle se escuchan que hubo empresas que pusieron más de medio millón de dólares por una cuota de langostino que ni siquiera quedará asentada en sus permisos de pesca. Pero este no es el tema, son comentarios, nada más y nosotros solo mensajeros.
Lo concreto que nadie apostaba a un electorado que practique el harakiri, los pueblos llegan al extremo, pero jamás se suicidan y difícilmente se pasen de la raya.
Por eso aquella célebre frase que se le atribuye a Don Juan, el personaje central de la obra clásica del teatro español Don Juan Tenorio, pero quienes lo hemos leído, sabemos que no existe en su letra una mención semejante y que la misma podría radicarse en México, en el año 1644 que dice que “los muertos que vos matais, gozan de buena salud”, nunca una mejor ilustración de los sucesos acontecidos este último fin de semana.
Se daba por extinta la pesca de Mar del Plata, y el resurgimiento viento en popa de “la banda del sur” que se frotaban las manos para salir en la foto, a aquellos y a quienes detractores de la pesca marplatense que les enseño todo y les permitió crecer y desarrollarse, negociaron por los pasillos asociaciones con fines de lucro y de ventajas, traicionando al espíritu de la pesca de Mar del Plata. Pero se les aguó el asado.
La pesca de Mar del plata, goza de buena salud, aun al borde de su estocada final. Será un alerta.
Lo que viene
Entendemos que una de las premisas que debe volver a ser el eje central en cada ámbito, y mucho más en el dilatado sector de pesca fue la que mencionó el Presidente electo Javier G. Milei, » Dentro de la Ley todo, fuera de la Ley nada «, parafraseando a otro presidente.
Según esta redacción pudo saber, entre gritos, agasajos y festejos ayer por la noche, hay en claro una política de Estado inequívoca a hacer los cambios que el país y la actividad que nos une necesita hacer para comenzar a revertir años de decadencia y tienen que ver con,
- Apertura al comercio exterior.
- Reforma laboral.
- Reforma Administrativa del Estado.
- Reforma previsional.
- Política Educativa.
- Reforma Tributaria Impositiva.
- Régimen Federal Fiscal.
- Reforma de la Salud.
- Política de Seguridad.
En rasgos generales, cada punto merece una nota aparte, pero como solo nos abocamos al sector pesquero, entendemos que bajo el paraguas del comercio exterior, sumamente ligado al Tipo de Cambio, el mismo será competitivo con sesgo exportador, alto. Donde se destaquen,
- La eliminación y/o reducción a mínima expresión de los impuestos de importación.
- La inmediata negociación y tratados de libre comercio con el mundo.
- Eliminación de arancel común del MERCOSUR.
- Eliminación de derechos de exportación en productos primarios y elaborados y creación de impuesto a las rentas extraordinarias de los sectores exportadores.
- Se eliminarán todas las barreras que sufren las exportaciones para fomentar su crecimiento exponencial.
- Se limitará el derecho a huelga. La ley preverá la inhabilitación y multa para los dirigentes sindicales que violen las instancias legales con huelgas salvajes u otros medios extorsivos.
De esta manera, además, se tendrá en cuenta la reforma extensiva a la modificación de 4 leyes: Ley 14.250 de Convenciones Colectivas de Trabajo (1953), Ley 18.610 de Obras Sociales (1970), Ley 20.744 de Contrato de Trabajo (1974) y Ley 23.551 de Asociaciones Sindicales (1988).
En grandes rasgos, son estos los nuevos lineamientos con que las autoridades electas pretenden modificar el curso de años de desvíos en la actividad. La imágen del Estado presente quedará en el recuerdo como una de las etapas de mayor intervención a la actividad privada por parte del sector público solamente con fines de perpetuarse en el poder mediante dádivas a sectores necesitados, o por otros negocios.
No obstante hay que reconocer que actualmente dentro de la gestión pública siguen existiendo altos valores en defensa de la gestión estatal, destacando el compromiso y predisposición de elementos que bien podrían, por experiencia, compromiso y gestión, permanecer -al margen de inclinaciones políticas-, dentro de un sector pujante de la economía del país como es el dinámico sector pesquero.
Sin temor, los buenos y los eficientes siempre tendrán lugar incluso en la actividad privada.
Párrafo aparte, uno de los tópicos de mayor impacto en el primer discurso de 17 minutos de extensión del Presidente Electo de la Nación, ayer por la noche a minutos de conocerse el resultado de la contienda electoral, fue la frase “No hay lugar para gradualismo ni para la tibieza, no hay lugar para medias tintas”, entendemos un gran mensaje para quienes apostaron toda la vida al negro y al colorado entre la tibieza y la ventaja de acercarse al ganador.
Comienzan días de fuerte disputas donde el medio ambiente, la economía circular y los disparates de imaginar un proteccionismo desmedido mayor que el actual, quedarán claramente expuestos por quienes utilizando el poder de empresarios conducen el lobby pesquero en defensa de sus propios intereses, más que de quienes los pusieron en ese lugar.
La actividad pesquera es extractiva, primaria en un fondo marino arenoso, barroso y oscuro donde es parte de un sistema productivo que emplea personas, que son parte también de la cadena trófica de nuestro mar.
Con la esperanza de volver a la fuente, la pesca de Mar del Plata, goza de buena salud.!
El Futuro
El futuro fue, es y será de los jóvenes. Por eso es tan importante volver a la fuente, educar, formar, instruir, capacitar y volcar todos los conocimientos en quienes tengan la continuidad de profundizar los destinos de la actividad (vaya con un ejemplo que llega del sur, empresarios que buscan a través de la escritura de un libro perpetuar una idea, un sueño, un camino).
Es necesario capacitarse, buscar la idoneidad tan mencionada en la Constitución Nacional en su artículo 16, que debiese ser y lo es, la única condición para acceder a una función pública. Es necesario formar nuevos cuadros dentro de la actividad que den continuidad y proyección al cluster pesquero. Es momento de aunar esfuerzos, trabajadores, dirigentes sindicales con experiencia y con ideas nuevas, empresarios y sociedad en general. No es posible que la principal industria pesquera de Mar del Plata generadora de puestos de trabajo genuino no esté en la mesa de discusión y tenga pésima imágen en el común denominador de la sociedad. Algo se ha hecho mal, lo importante es reconocer, enmendar y modificar para crecer y desarrollar.
El cluster pesquero y toda la actividad necesita buscar los medios para tener una agenda abierta con las futuras autoridades políticas conductoras de nuestro país. Primero por la continuidad laboral de quienes todas las mañanas van a una universidad, o quienes debajo de la lluvia en la bicicleta van a una planta de procesado de pescado buscando el sustento de su familia. Todos no son iguales y todos son muy importantes.!
El sistema pesquero debe formar y forjar nuevos maquinistas, capitanes y tripulantes incluso hasta subsidiando su estudio y apostando a la integración futura de nuevos cuadros dentro de sus filas. Las empresas deben hacerse fuertes, con inversión, con capital y con trabajo idóneo para dar sostén a la economía de la ciudad, la provincia y la nación.
En todo inicio de ciclo, la esperanza se renueva pero también el trazado de objetivos y la arquitectura de un nuevo modelo productivo pesquero con integración a nuevos participantes consolidando lo que los ancestros de la pesca han enseñado.
Por lo dicho, se desprende que lo que viene, tendrá una gran polarización y por ende un modelo de alta conflictividad.
Argentina, el mar argentino tiene todo, chocarlo dependerá siempre de todos.