En el análisis de fondo de la Resolución 9/2022 como enmienda de la 7/2018, sobre la administración y medidas del manejo del recurso langostino, no cambio nada y mucho menos infiera donde se debe procesar el langostino.
Ordenó ciertos artículos, ampliando y segmentándolos; por otro lado, informó actividades tácitas y otras que se hacían ya desde hace tiempo o en la práctica. ¿Cuáles? Por ejemplo que se impulse a tener 3 campañas anuales del INIDEP sobre el recurso, cosa que de hecho viene ocurriendo hace varios años. Que se eliminen los dispositivos de selectividad, a decir verdad, nunca funcionaron por las densidades que hay en el mar argentino, las pérdidas ocasionadas eran en volúmenes de langostino L1 o hasta L0, en contraposición a lo que se fomenta desde la subsecretaria de pesca y el ente biológico como objetivo de la pesca, seamos claros, era una gran mentira, nadie pescaba con dispositivos obligatorios de selectividad, también se documentó, es decir, achicó la brecha entre lo real y lo ficticio de una resolución que nadie leía siquiera; y que tomó relevancia cuando desde la DNCyFP haciendo ejercicio de su función, analizó y ejecutó al pie de la letra cada artículo de la resolución (por otro lado es su facultad y su obligación).
En cuanto al tema del procesamiento continental, tanto la resolución CFP 7/2018, la resolución SAGYP 171/2018 como la reciente resolución CFP 9/2022 siquiera mencionan o infieren donde se debe procesar el marisco que llega a puerto, de modo que esto fue una gran excusa para un movimiento que roza lo político más que lo operativo.
Ahora bien, si para algunos actores, desvirtuar la realidad, incentivar a plantear como que esta nueva Resolución 9/2022 puede dejar sin trabajo a la gente, es tan distante de la verdad como dificultad que tenga la gente de STIA para interpretarla.
En ningún lado, la Resolución CFP 9/2022, como otras, se expiden acerca de qué lugar del país tiene por objeto la industrialización y manufactura en tierra; históricamente son muy pocos los armadores que procesan lo que pescan, la gran mayoría, como lo viene haciendo en los últimos 4 años, de cada viaje, saca 1 o al máximo 2 camiones con destino plantas de procesado en Mar del Plata. Ocurrió el año pasado, y el anterior, y el otro…. y nadie dijo nada, como tampoco hubo merma en la actividad de las plantas patagónicas chubutenses. Hoy la disputa es política, no operativa y mucho menos económica.
Pero entonces, ¿Qué cambio? A decir verdad, nuestro estilo es la información no la opinión, debido que a veces cuando uno opina, ve una sola parte de un verdad, y la otra también tiene que ser exteriorizada, porque si no, estaríamos traicionando al lector o empujándolo a una noticia sesgada, pero intentemos un ejercicio.
Argentina en algunas especies esta extremadamente expuesta a los mercados internacionales. Si partimos de la base que cerca del 95 de lo extraído por estas latitudes tiene destino exportación, el que manda es el mercado internacional.
Ya desde las primeras convocatorias a exposiciones mundiales en España, se venia viendo que el mundo pos pandemia intentaba arrancar con las demandas pero otro acontecimiento erosionaba y justificaba la prolongación de la inactividad o al menos demorar la posible expansión, recuperación económica y de consumo, tan esperada.
Desde fines de Enero, la invasión de Rusia a Ucrania (dos fuertes compradores de pescado y marisco argentino; y actor principal energético de Europa) ya comenzaba a distorsionar variables intrínsecas que tienen peso directo con nuestra pesca.
La demanda de productos alimenticios, los precios de la energía, los precios y tiempos del transporte marítimo y un sinfín mas de temas relacionados al mundo convulsionado desde el inicio de la pandemia COVID-19 y ahora con los eventos desafortunados de Rusia y Ucrania.
Si a esto le sumamos, la fuerte actividad productiva de Ecuador con el camarón de cultivo que llegara a 1 millón de toneladas este año (5 veces mas que lo que estima pescar Argentina) donde China, EEUU, España y Reino Unido ya compraron mas de 300.000 toneladas, el coctel es preocupante, al menos.
Ver N de R https://pescare.com.ar/fuerte-impacto-del-vannamei-en-el-comercio-mundial-de-langostino/
Las cámaras de frío en Argentina aún están con muchísimo marisco de la zafra 2021-2022, no se vendió todo o mejor dicho quedo mucho sin vender, aunque algo se colocó en valores medios de u$s 8.00 con picos de u$s 8.25 para el entero congelado abordo.
Decíamos, hay mucho marisco aun en las cámaras principalmente en el sur, que es donde se procesa y manufactura el 95% del marisco fresco.
Por ahí, alguien esbozó la idea de pescar menos este año para no seguir congestionando cámaras que están al borde de su capacidad y al menos vender primero lo viejo, para dar espacio al langostino 2022-2023, mientras el recurso descanse.
En resumen, esta situación donde la STIA protesta para tener una mejor disputa en la negociación salarial cambia de eje a su rivalidad. La STIA tomó como que la Resolución Nro.9/2022 iba, ademas, a tener menor volumen de marisco para trabajar, para procesar, porque se lo llevan a otras provincias, entonces, hay un cambio de objetivo; hoy el malo de la película pasa a ser Mar del Plata que se lleva marisco para procesar a su ciudad en plantas clandestinas, al margen de la ley y deja sin trabajo a las plantas de Chubut….
Pero a decir verdad, desde hace muchos años un sector minúsculo de armadores siempre llevó a Mar del Plata algún porcentaje de la descarga, sin que fuese motivo de disputas. ¿Por qué antes no hubo problemas y ahora, sí? Precisamente porque las cámaras están llenas y la demanda internacional del congelado abordo siquiera discute precios, el comprador hoy, NO ESTÁ. Este es un tema político donde intervino el mismo gobernador Mariano Arcioni, y hacia donde todas las miradas están puestas para buscar la solución.
Ahora bien, si quien debe resolver esta encrucijada es un juez o el mismo Subsecretario de Pesca, significa que poco se ha aprendido. No se pueden transferir problemas propios con escasa posibilidad de resolución a otros participantes. Repetimos, analizando la Resolución CFP 8/2018 y la 9/2022, nada a cambiado, sin embargo lo que está ocurriendo es utilizar esta enmienda para generar un desconcierto y un desorden en una actividad que goza de rentabilidad, por ahora. Por otro lado, la posición de armadores es clara, si tienen permiso de pesca de langostino en aguas nacionales, y lo pescan en aguas nacionales, no solamente pueden bajarlo en cualquier puerto argentino sino que lo pueden procesar en cualquier punto del país, acaso el libre tránsito no es parte de la Constitución Nacional?