El secretario de Pesca del Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU), Juan Navarro, en comunicación con el programa «El quinto poder» en LU17, denunció este lunes la existencia de una campaña de intimidaciones, maniobras mediáticas y un ajuste encubierto dentro del sector pesquero. En este contexto, señaló a ciertos empresarios que, según sus declaraciones, «quieren bajarle el sueldo a los marineros que ganan lo que tienen que ganar», poniendo en evidencia un conflicto de intereses que afecta directamente a los trabajadores del gremio.
» Si las empresas tienen problemas de rentabilidad, que se lo reclamen al gobierno, pero los trabajadores no serán la variable de ajuste «, declaró Navarro, reafirmando la postura del SOMU contra las presiones empresariales.
El sector pesquero enfrenta un nuevo conflicto debido a la decisión de las empresas armadoras de no sacar a operar los barcos congeladores, exigiendo una reducción del 30% en los valores de referencia para el langostino entero congelado a bordo, que ronda hoy según el convenio colectivo de trabajo firmado y homologado por la Secretaria de Trabajo en U$S 5.800, » valor que escapa a la realidad del comercio actual de esa mercadería «, esgrimen las cámaras del sector congelador justificando su actitud.
Desde el Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU), su secretario de pesca, Juan Navarro, denunció que esta medida es una estrategia de presión para forzar a los trabajadores a aceptar menores ingresos.
«Nosotros no vamos a permitir tal rebaja. Las empresas argumentan que la pesca de langostino no es rentable, pero al mismo tiempo solicitaron la apertura anticipada de la parte norte del caladero en la semana del 13 de marzo. Esta es una medida extorsiva para que los marineros salgan a pescar por menos dinero del que les corresponde «, sostuvo Navarro. Según el dirigente sindical, esta zona no es una veda permanente y su apertura se determina en función del estado del langostino y la presencia de merluza, abriendo generalmente entre el 1 y el 15 de abril. (- manifestando cierta incongruencia, ya que la medida de levantamiento de la restricción de pesca es biológica y no por fecha de calendario -).
El SOMU considera que la intención empresarial es una amenaza directa contra los trabajadores. «Desde el sindicato y las bases, que la semana pasada realizaron asambleas en todas las delegaciones del país, hemos decidido no permitir ninguna baja salarial. Si las empresas tienen problemas de rentabilidad por la carga impositiva, que se lo reclamen al gobierno, pero los trabajadores no serán la variable de ajuste«, enfatizó Navarro.
El dirigente sindical denunció también un intento de precarización laboral y una maniobra para dividir a los marineros. «Algunos empresarios han querido desviar la discusión hacia una supuesta interna sindical, pero todas las agrupaciones dentro del SOMU están unidas en la defensa del salario del marinero. No permitiremos que se reduzca un 30% de la producción, lo que representa directamente el sueldo de los trabajadores«, afirmó.
Navarro desmintió versiones que aseguran que los marineros perciben ingresos exorbitantes. «Se ha dicho que un marinero gana más de 20 millones de pesos al mes, lo cual es completamente falso. Si esto fuera cierto, los marineros serían ricos, y la realidad es que viven con lo que ganan en la temporada. La mayoría son trabajadores de relevo que, una vez finalizada la temporada, deben subsistir el resto del año con esos ingresos. Nadie menciona la rentabilidad real de las empresas «, sostuvo.
Según informes oficiales, en 2024 la exportación de langostino se realizó a un valor de 6.500 dólares la tonelada, lo que evidencia que las empresas obtienen importantes ganancias. «Ellos dicen que no llegan a 5.500 o 6.000 dólares por tonelada, pero en realidad obtienen entre 7 y 7,5 millones de pesos por tonelada exportada, mientras que al marinero se le paga apenas $36.000 pesos por tonelada de producto congelado y procesado. Que expliquen dónde no tienen rentabilidad«, cuestionó Navarro.
El secretario de pesca del SOMU recordó los riesgos que enfrentan los trabajadores del mar. «El marinero no es rico, apenas subsiste. Trabaja en condiciones peligrosas, deja a su familia, y hay muchos que han perdido la vida en el mar sin que sus familias reciban ninguna compensación. Sin embargo, las empresas multimillonarias quieren que la crisis la paguen los marineros«, señaló.
Navarro también criticó que las empresas utilicen los medios de comunicación para exponer sus reclamos sin formalizar ninguna presentación ante el Ministerio de Trabajo. «La semana pasada tuvimos una audiencia porque se vence el acta acuerdo de los salarios básicos. Solicitamos una actualización para los próximos seis meses y quedaron en respondernos. Sin embargo, no presentaron ninguna documentación formal que respalde su supuesta crisis. Solo buscan presionar a través de declaraciones en los medios «, denunció.
Desde el SOMU ratificaron que no aceptarán ninguna rebaja salarial. «Las empresas quieren que seamos parte de las pérdidas, pero cuando tienen ganancias no nos incluyen. Este sindicato no cederá en la defensa del salario de los marineros«, concluyó Navarro con vehemencia.