Frente a la incertidumbre sobre el inicio y desarrollo normal de las zafras pesqueras, y la falta de garantías sobre la continuidad de las condiciones laborales conquistadas, el sindicato declaró el estado de alerta y movilización en todos los puertos de la provincia.
La medida, adoptada como acción preventiva y legítima conforme a la Ley 23.551, busca defender colectivamente los derechos fundamentales de los trabajadores de la actividad pesquera ante el riesgo inminente de su vulneración. SUPA aclaró que esta declaración no implica por el momento la adopción de medidas de acción directa, sino que constituye una advertencia pública, pacífica, formal y organizada.
El secretario general del SUPA Chubut, Alexis Gabriel Gutiérrez, manifestó que la organización sindical se encuentra en vigilancia activa y en sesión permanente, con las bases informadas, movilizadas y dispuestas a defender los derechos laborales, salarios y convenios colectivos sin aceptar avances arbitrarios ni unilaterales.
“El trabajo portuario es esencial, fuerza productiva y nervio del comercio internacional”, sostuvo Gutiérrez, e instó a todos los actores de la actividad a actuar con responsabilidad y madurez institucional. El sindicato remarcó que las medidas de fuerza serán la última opción, una vez que no se tengan en cuenta las necesidades reales para que los trabajadores puedan desempeñarse en condiciones dignas.
El comunicado destaca la importancia de garantizar la paz social, entendida como el efecto de la plena vigencia de la justicia social para los trabajadores afectados por lo que definieron como un “salvaje lock out patronal”. Además, advirtió que atentar contra los convenios y derechos conquistados implica romper las reglas del juego democrático y tendrá consecuencias.


“Quien rompa los consensos legítimamente alcanzados será responsable del quiebre de la paz social”, afirmó el SUPA, remarcando que la paz debe sostenerse en el diálogo y el respeto mutuo entre todos los actores involucrados en la actividad portuaria.
El sindicato concluyó reafirmando su compromiso con la producción, la legalidad y la dignidad del trabajador portuario, aclarando que la vocación al diálogo no debe confundirse con complacencia o pasividad. “No hay futuro posible si se desconoce la dignidad inherente de los trabajadores”, finalizó Alexis Gutiérrez, sin entender que quienes fijan los precios en el mercado internacional, hoy no solamente están varios peldaños mas abajo, sino que directamente ha desaparecido la demanda y como tal, hacer viable la actividad es responsabilidad de todos los participantes de la cadena. El negocio como tal, hoy quedó desvirtuado. Adaptarse al cambio será una muestra de madurez y de supervivencia.