Como es habitual, con una importante concurrencia, el Astillero Naval Federico Contessi y Cía. S.A., concretó la botadura del tercer barco –de una serie de seis que le fueran encargados a principios del 2021- por parte del Grupo Arbumasa Pesca Austral para su armadora Dalian Huafeng Aquatics Products.
Se trata de un moderno buque fresquero que posee doble cubierta con casco de acero y una superestructura de aluminio que pasará a engrosar la flota de 23 buques de la empresa dedicada también a la exportación de productos ictícolas de nuestro país, venta que se estima en unos 150 millones de dólares anuales.
Entre el segundo y tercer mes del presente año, el astillero ya había entregado dos de los seis buques pactados, los cuales ya han realizado su primera temporada de pesca, cumpliendo ahora a través de esta tercera entrega con el 50% de la mayor inversión privada en la industria naval argentina en las últimas tres décadas y que han sido financiadas por el propio astillero, renovando de esta manera a otras seis embarcaciones que ya poseían entre 30 y 40 años de antigüedad, cuatro de las cuales ya habían sido construidas por el mismo astillero en las décadas del ’70 y del ’80.
Si bien el titular del astillero mostró en su discurso las dificultades económicas que está atravesando la industria, el proceso de inversión parece continuar de forma permanente en sus instalaciones, habida cuenta que la visita que realizó PESCARE se pudo apreciar la construcción de cuatro nuevos barcos, además de la edificación en un predio lindero a la estructura tradicional (sería la cuarta naval industrial), donde tendrán capacidad para realizar buques de hasta 75 metros de eslora.
Como es habitual quien se pronunció ante los presentes (transmitido además a través de YouTube), fue el presidente del astillero Domingo “Vito” Contessi, quien ponderó la labor y la planificación del seleccionado nacional de fútbol para lograr un objetivo resonante, a la vez que agradeció a todos aquellos argentinos que se colocan la camiseta no solo para festejar la obtención de un campeonato deportivo sino también, para invertir, trabajar y solucionar los problemas de nuestro país.
En un discurso con muchas alegorías futboleras, Contessi destacó que “al mundial de la eficiencia y la competitividad lo estamos perdiendo por goleada. La obligación que tenemos como empresarios es describir nuestra realidad y de la misma forma como agradecimos todas las políticas públicas que incentivaron a la industria naval, también fuimos advirtiendo en cada botadura que el atraso cambiario nos estaba llevando a un callejón sin salida. Hoy estamos pagando las consecuencias de no atender ese reclamo a tiempo y aunque vemos una pequeña luz al final del túnel de la mano de una política más austera del Ministerio de Economía, que intenta contener la inflación y recuperar la competitividad y que ha comenzado un auspicioso diálogo con el sector pesquero y la industria naval, tenemos miedo que el deterioro de la economía y nuestras urgencias sean demasiado pronunciadas para reconstruir el equilibrio necesario en el mediano plazo.”, cerrado con un fuerte aplauso de la mayoría de los presentes.
Participaron del acto el Ministro de Desarrollo Agrario de la Provincia de Buenos Aires, Dr. Javier Rodríguez, el Subsecretario de Puertos y Vías Navegables de la Nación, Patricio Hogan y la Lic. Carla Seain, Subsecretaria de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Provincia de Buenos Aires. Además el acto sirvió para darle la bienvenida al nuevo Jefe de la Prefectura Naval Mar del Plata, Prefecto Principal Rodolfo José Cattaneo, quien participó por primera vez de una botadura en su carácter de máximo responsable de la Autoridad Naval en nuestra ciudad.
El “Huafeng 882” recibió su bautismo por parte del Obispo Diocesano Gabriel Antonio Mestre, en tanto que la madrina de la ceremonia María Cecilia Giacur fue la encargada de estrellar la botella de champagne contra el casco del buque en el instante previo a que tocara por primera vez las aguas del mar.
La flamante embarcación fue especialmente estudiada para operar en las costas argentinas y responde al prototipo 27 AC-DH, siendo un buque versátil y apto para realizar pesca de arrastre y media agua, tendiendo puerto de asiento la ciudad de Mar del Plata.
El barco posee 24,10 metros de eslora, una manga moldeada de 7,80 metros y un puntal moldeado de 3,65 metros, pudiendo alcanzar una velocidad de 10 nudos a través un motor propulsor y dos motores auxiliares (uno a babor y otro a estribor), destacándose en su equipamiento hidráulico de pesca 2 guinches, 2 rodillos de red, un guinche de fondeo y un guinche de copo.