Buscan incluir a la pesca en acuerdo de libre comercio entre el Mercosur y la Unión Europea

La producción pesquera local podría ser incluida en el Acuerdo de Libre Comercio que negocian los países miembros del Mercosur y la Unión Europea (UE), al menos esa es la intención que manifiesta el Gobierno nacional.
En los últimos días, la Subsecretaría de Pesca de la Nación lanzó una consulta para conocer la posición del sector con respecto a las negociaciones bilaterales en marcha.
Las cámaras empresarias del sector fueron contactadas para que realicen las ofertas de desgravación de sus productos y, al mismo tiempo, expresen los requerimientos de acceso al mercado europeo, incluyendo eventuales problemas.
Las respuestas serán recibidas hasta este martes en la Secretaría de Relaciones Económicas Internacionales del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto, de acuerdo a la información a la que accedió Pescare.com.ar.
Pese al crecimiento de otros destinos, la zona euro, con España al frente, sigue quedándose con más del 30 por ciento de las exportaciones que produce la industria pesquera argentina, de allí la importancia de sostener acuerdos.
“Para la Argentina, un eventual acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea deberá reconocer en forma explícita las diferencias de desarrollo relativo y de estructuras productivas entre ambas regiones, a través de un efectivo trato especial y diferenciado a favor del bloque sudamericano”, expresaron las autoridades del Ejecutivo nacional en la convocatoria.
Caída del SGP
Tras una suspensión del seis años, el Mercosur y la UE retomaron en 2010 las negociaciones para cerrar un acuerdo de libre comercio entre ambos bloques. Para el próximo mes de diciembre está previsto el intercambio de ofertas de bienes.
El contexto es complejo, no sólo por las diferentes de posiciones que cruzan al Mercosur, sino por la urgencia que impone la caída del Sistema de Preferencias Generalizadas (SPG), el cual traerá aparejado un aumento de aranceles.
Esto sucede porque el Banco Mundial registró tres años de un ingreso per cápita anual superior a los 4 mil dólares en nuestro país. Así, el arancel del langostino pasará del 4,2 al 12 por ciento, y el de merluza del 4,2 al 7,5 por ciento, por citar dos casos emblemáticos.
El incremento, además, se aplica cuando la actividad soporta un aumento generalizado de costos que compromete su competitividad. Este año volverá a rondar, en promedio, el 25 por ciento contrastando con la caída de varios precios.