El escenario de la pesca argentina ha cambiado sustancialmente, desde marzo PESCARE viene anticipando al lector los cambios internos en la macroeconomía con fuerte impacto en el esquema de costos de las empresas sean pesqueras primarias extractivas, industriales y/o comerciales exportadoras.
Además de un cambio de expectativa en el sector de la demanda condicionado fuertemente por noticias que ya son de público conocimiento y que impactan negativamente sobre el langostino (Vedette de la pesca argentina) y sobre la merluza, donde hasta el momento no se terminó de solucionar el problema con Brasil a pesar de una trabajo superlativo de SENASA, Cancillería, Ministerio de Desarrollo Productivo y representaciones del vecino país. Se analiza llevar la problemática al seno de la pesca.
Antecedentes, ver
https://pescare.com.ar/fuerte-impacto-del-vannamei-en-el-comercio-mundial-de-langostino/
En tal sentido, la Cámara de la Industria Pesquera Argentina (CAIPA) emitió un extenso y pormenorizado comunicado –acompañado de indicadores de interés pesquero- donde detalla las principales dificultades que afronta el sector en la actualidad.
La entidad ha indicado a modo de introducción y de muestra sobre el sector que “la industria pesquera argentina tiene mucho potencial para ser generadora genuina de divisas para nuestro país y si se adoptan medidas adecuadas, de incrementar ese potencial”.
“Pero lamentablemente, diversas medidas y actitudes que se han tomado últimamente, solo pueden perjudicar toda la actividad pesquera y además, poner a las empresas en situación de riesgo”.
“Enunciaremos a continuación algunas de las cuestiones que consideramos, deberían ser atendidas por las autoridades competentes, para posibilitar un mejor desarrollo de la industria”.
Los puntos que enuncia CAIPA, mostrados con números precisos, son en referencia a:
- Actividad con el elevado resultado positivo en su comercio exterior.
- La importancia de la pesca en el Partido de General Pueyrredón.
- La distancia al caladero.
- La situación económica actual no fomenta el desarrollo de la actividad pesquera.
- Tipo de cambio no adecuado a la realidad económica.
- Incremento de los costos laborales.
- La conflictividad como hecho que afecta la rentabilidad empresaria.
- Incremento en los valores de otros insumos importantes utilizados por la actividad pesquera (el costo del combustible).
- Incremento del costo del aceite que utilizan en sus motores los buques.
- El valor de las cajas utilizadas en la Industria Pesquera.
- El valor del nylon utilizado en la Industria Pesquera.
Considerando que la pesca es uno de los siete principales complejos exportadores de nuestro país, llegando incluso a superar con sus exportaciones en los últimos años, a las exportaciones de las carnes rojas, es que indican que “al exportar la pesca más del 90% de su producción, ello trae como consecuencia un resultado muy positivo en su comercio exterior, esto es que exporta mucho más de lo que importa”.
“Prueba de ello es que en el año 2021 la pesca exportó por U$S 1.990.162.000 e importó por U$S 215.015.000, lo que dio un resultado positivo para el comercio internacional de la pesca de U$S 1.775.147.000”.
“En esa situación, se deberían tomar las medidas que correspondan para facilitar la importación de todos los productos y repuestos que necesita la pesca para desarrollar su actividad, ya que en la actualidad es sumamente complejo poder lograr la importación de esos insumos”.
Puntualmente sobre el Partido de General Pueyrredón, y sobre la relevancia que posee el sector de la pesca en el mismo, el informe de CAIPA indica que “la pesca, con el transcurso de los años, se ha convertido en una de las actividades más importantes” de ese partido. Tomando como punto de partida datos que brindó la Aduana de Mar del Plata, resaltan que “se oficializaron permisos de exportación de productos pesqueros durante el año 2021, por un total de U$S 880.780.280. Además, a ese importe se le debe agregar todo lo que produce Mar del Plata, principal proveedor de productos pesqueros que se comercializan en el mercado interno de nuestro país, donde no existen estadísticas certeras pero ese comercio se puede cuantificar en más de U$S 100.000.000 anuales”.
Otro de los puntos que pone de manifiesto la Cámara empresaria, en referencia al caladero, donde marca que la mayoría de los cardúmenes se ha desplazado hacia el sur del país, lo que ha ocasionado para las embarcaciones con asiento en Mar del Plata, un incremento en el consumo de combustible y solicitan que si fuesen reestablecidos beneficios por las exportaciones desde puertos patagónicos –como ya fueron solicitados en el sur- sean otorgados a las exportaciones pesqueras realizadas desde puertos atlánticos para que de ese modo se pueda compensar el mayor gasto de combustible que tiene la flota de Mar del Plata, poniendo de ese modo igualdad con la flota que opera desde los puertos sureños que tienen un acceso más cercano al caladero.
El pormenorizado informe público, pone además de manifiesto un tema que se viene mencionando en distintos sectores, donde la pesca es tal vez uno de los más perjudicados y es en referencia al tipo de cambio.
“Al exportar la pesca casi toda su producción hace que el tipo de cambio vigente sea sumamente importante para poder determinar si la actividad es o no rentable”.
“Comparando la evolución de precio del dólar en relación al índice de precios al consumidor podemos observar que durante el año 2020, el dólar se ajustó en un 40.51% y en igual período el costo de vida se incrementó en un 36.2% por ciento”.
“En ese período debe destacarse que el mayor incremento del valor del dólar, quedó compensado por la reinstalación de los derechos de exportación”.
“En el año 2021, el dólar se ajustó en un 22.07% y el costo de vida se incrementó en un 50.9%”.
“En lo que va del año 2022, el dólar tuvo un ajuste del 21.91% y el costo de vida del 36,16% por ciento”.
“Si bien es cierto que los derechos de exportación reinstalados se han visto reducidos para algunos productos pesqueros, debe considerarse que sobre el valor del dólar oficial se deben considerar, en promedio, una disminución al 5% por esos derechos, para los productos que tienen industrialización, lo que agrava aun más, el atraso cambiario”.
“La importante diferencia entre la actualización del tipo de cambio comparado con el incremento del costo de la vida y, sobre todo con los ajustes salariales, demuestra la evidente distorsión que está presentando en una variable económica que es fundamental para la actividad”.
Sobre los costos laborales también mostraron números que marcan otro de los puntos en los cuales entiende CAIPA, están transitando un momento conflictivo, apuntando directamente sobre la inflación, a la cual calificaron como “un flagelo” que afecto principalmente a los trabajadores y en línea directa con el salario que estos perciben.
Pusieron de manifiesto que entre las Cámaras y los Sindicatos se han reunido para ajustar los salarios dos veces al año, marcando que “en esa situación en el año 2020 los salarios se incrementaron en un total del 45%”.
“En el año 2021, el ajuste salarial fue del 45% promedio y, en lo que va del año 2022, el ajuste salarial otorgado ya tiene un mínimo otorgado del 45% y un máximo del 50%”.
“Para demostrar el esfuerzo que realizaron las empresas pesqueras, debemos comparar la evolución del tipo de cambio en los mismos períodos con los incrementos salariales otorgados y así podemos destacar las siguientes diferencias:
- 2020 tipo de cambio 40.51% costo de vida 36.10% salarios 45%.
- 2021 tipo de cambio 22.07% costo de vida 50.9% salarios 45%.
Y para el año 2022 tipo de cambio 21.91%, costo de vida 36,16%, salarios entre 45% y 50% de incremento”.
De este modo destacar que las diferencias entre esas variables, lo único que consiguieron fue la pérdida de rentabilidad en las empresas.
Otro de los hechos que destacaron es que las empresas, en los períodos mencionados, además de afrontar los reclamos laborales, han visto impedida de ser realizada su actividad en varias oportunidades por diversas medidas de acción directa que fueron adoptadas por los gremios del sector, que han imposibilitado la realización de tareas en el puerto, ocasionadas por el corte de los ingresos a los mismos, y sobre la zona industrial por medidas de acción directa.
Hasta la fecha no se ha logrado que los reclamos se encaucen ante las autoridades laborales competentes, y que las autoridades judiciales y policiales tomen las medidas que establecen las disposiciones legales vigentes para impedir ese tipo de medidas.
Destacaron desde CAIPA que “seguir aplicando convenios del año 1975, cuando la realidad de la pesca era totalmente diferente, hace que las empresas no sean proclives a incrementar sus dotaciones de personal”.
La pesca, como tantas otras, utiliza una gran cantidad de insumos, algunos muy puntuales, y otros que son en común con otras actividades, por caso, el combustible y el incremento que viene sufriendo. Sobre este punto también la Cámara hizo referencia:
“Si hay un insumo que tiene gran importancia en los costos de la explotación pesquera, podemos indicar al combustible. Para demostrar como el costo del combustible no ha tenido relación con el incremento del tipo de cambio, podemos indicar que en el período comprendido entre el mes de Septiembre de 2021 y el mes de Mayo de 2022, el gasoil tuvo un incremento porcentual del 127.90%, y en igual período, el tipo de cambio se ajustó solamente en un 24.3%, según nos informa Capeca en el informe que se adjunta”.
Tal el informe que brindaron, remarcaron que el aceite que es utilizado por las embarcaciones tuvo un incremento en sus precios durante el período comprendido entre los meses de Febrero de 2020 y Julio de 2022, del 256.3% y, en el mismo período, el tipo de cambio solo se ajustó un 110.1%.
Ítems no menores son por el ejemplo el valor de las cajas utilizadas en la industria pesquera, como así también el nylon.
CAPECA ha indica que en el caso de la caja máster usada, el valor de la misma se incrementó, durante el período comprendido entre los meses de agosto de 2020 y Julio de 2022, en un 236,6% y, el tipo de cambio, solo en un 72.7%, en igual período.
Sobre el nylon y citando el mismo informe, se marca que el precio del nylon que se usa en la industria, se incrementó, durante el período comprendido entre Enero de 2020 y Marzo de 2022, en un 175.3%, y en igual período, el tipo de cambio solo en un 83.8%.
A la conclusión que arribaron es que “existe una grave distorsión de las variables económicas relacionadas con la actividad pesquera que afecta sus posibilidades de desarrollo y continuidad y que merecen que sean consideradas en forma urgente por las autoridades del sector”.
“Los ejemplo indicados, demuestran un grave problema, originado por el incremento de los costos que ha tenido la industria pesquera y el valor de la divisa que recibe por las exportaciones que realiza, lo que está ocasionando graves perjuicios a la industria que es necesario se corrijan para que la misma pueda seguir con una actividad posible desde el punto de vista económico”.
Concluyen desde la Cámara de la Industria Pesquera Argentina que un hecho que debe ser destacado es que durante el presente año, la exportación de langostinos, que representa un 60% del total de los ingresos del sector, ha sufrido una importante caída, tanto en la demanda del producto, como en los precios que se abonan por el mismo.
“La caída del valor del Euro en relación con el dólar, que de estar 1.15 de dólar por Euro, ahora está debajo de 1, la inflación que también afecta a Europa, la situación política originada por la guerra de Ucrania y, la caída de la demanda, originada por todos esos hechos, ha tenido como consecuencia, que el precio del langostino entero cayó un 25% en el curso de este año, con lo cual no existe rentabilidad alguna en ese producto”.
Destacan que el incremento de los costos de la mano de obra en relación al dólar, ha conseguido que los langostinos que tienen proceso de industrialización, como las colas, el devenado, etc., hayan ido perdiendo el margen de rentabilidad que tenían.
“Agrava la situación, la importante cantidad existente de la temporada anterior, lo que sumado a la que se produzca en la campaña actual, hará que las empresas tengan mucho capital invertido e inmovilizado en un producto que tiene tanta importancia en las exportaciones pesqueras argentinas”.
Destacan un tema que venimos siguiendo y mostrando a través de PESCARE, que es el langostino de cultivo, que compite contra el langostino salvaje y natural de nuestro país, tiene un precio de venta para el consumidor mucho menor, por lo que lo hace más atractivo, y demás, tiene margen en su precio de costo que le permite seguir bajando su precio en los mercados de consumo, lo que complica aún más la venta del langostino argentino, sostienen desde la Cámara.
“Los temas que hemos planteado, que no son los únicos que afectan a la industria pesquera argentina, deben ser urgentemente considerados y resueltos ya que, no debe olvidarse que en otras oportunidades, cuando la situación económica afecto a las empresas pesqueras, la consecuencia directa fue la quiebra o concurso de importantes empresas del sector”.
“Ello ocasionó la pérdida de ingresos por exportaciones que no se realizaron y también, la disminución del nivel de ocupación y de ingresos en un importante número de personas que se desempeñan en los principales polos pesqueros de nuestro país, con las consecuencias que esos hechos ocasionaron en esas localidades y que todavía son recordados” concluyó CAIPA, adjuntando el informe detallado que hemos mencionado.
Informe Completo de CAIPA, clic en el enlace
https://pescare.com.ar/wp-content/uploads/2022/07/CAIPA-GATECILLA-DE-PRENSA.pdf