La actividad pesquera continúa paralizada por conflictos que combinan demandas salariales, incertidumbre fiscal y desacuerdos entre sindicatos y empresas. No obstante, dos audiencias convocadas esta semana por el Ministerio de Capital Humano podrían destrabar la situación y permitir el inicio de la temporada en aguas nacionales como destrabar la conciliacion obligatoria decretada para el segmento fresquero.
El pasado viernes 13 de junio se llevó a cabo en Buenos Aires una reunión clave que reunió al ministro de Trabajo, Julio Cordero, con los gobernadores de Santa Cruz, Claudio Vidal, y de Chubut, Ignacio Torres, además de representantes del Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU), el Centro de Patrones y el intendente de Puerto Deseado, Juan Raúl Martínez. Durante el encuentro se plantearon posibles salidas al conflicto, como la implementación de exenciones fiscales temporales para reactivar la actividad sin afectar los ingresos de los trabajadores.
En ese marco, se fijó una nueva reunión para este martes 17 de junio, donde se espera que participen también las cámaras empresarias. La expectativa está puesta en que se formalicen medidas de alivio tributario que permitan salir del estancamiento y poner en marcha las operaciones pesqueras con carácter de urgencia.
Por otra parte, el conflicto en la flota fresquera tuvo su propio capítulo el martes 10 de junio, cuando se celebró una audiencia en el marco de la conciliación obligatoria. Si bien no se alcanzó un acuerdo definitivo, las partes acercaron posiciones y el Ministerio evalúa la viabilidad de homologar una propuesta elaborada entre empresarios y gremios.
Como resultado de esos avances parciales, se convocó a una nueva audiencia presencial para el jueves 19 de junio a las 12:30 horas. El Ministerio instó a los actores del sector a continuar el diálogo de manera privada en los días previos, con el objetivo de allanar el camino hacia una salida consensuada.
Mientras tanto, el paro en la flota congeladora sigue vigente y el malestar en los puertos del sur se acentúa. Las provincias, por su parte, presionan por soluciones urgentes ante el riesgo económico y social que implica una temporada sin actividad.
Esta semana será decisiva para el futuro inmediato del sector pesquero. Los acuerdos que puedan surgir en las audiencias del martes y el jueves marcarán si la industria logra ponerse en marcha o si el conflicto se profundiza.